El anuncio que realizó la OMS ha generado mucha polémica en la comunidad científica. Para esta organización, la adicción a videojuegos es una patología que formará parte de una clasificación de enfermedades. Tras décadas de estudios, esta institución comprobó que los juegos de vídeos deterioran las relaciones sociales, familiares, personales e incluso el nivel educativo y otras ocupaciones.

Desde 1990, la OMS no actualizaba la Clasificación Internacional de las enfermedades (ICD-11), pues con la declaración de esta nueva patología, no se dudó en incluirla en la décima primera edición de su revista para el 2020. Esta organización decidió reconocerla como un trastorno mental por las siguientes razones:

1.- Pérdida de control: la manera en que como se refleja la conducta de las personas desde el inicio, frecuencia, duración, finalización y contexto del juego.

2.- Prioridad: se refiere a poner en primer lugar el juego antes que tus intereses vitales y actividades diarias.

3.- Escalada de la conducta: consiste en el desarrollo de conductas negativas tales como la agresividad.

La OMS aseguró en un informe previo que el uso excesivo de los juegos puede generar los siguientes problemas:

– Debilitamiento del rendimiento escolar o laboral por el juego.

– Dificultades en el dormir u otros cambios de hábitos significativos.

– Empobrecimiento de los vínculos sociales y de los intereses en general fuera del juego.

– Expresiones de ansiedad o euforia durante la actividad.

El portal “Psicología y mente” establece que la OMS ha trabajado con este tema desde el año 2005. La decisión de considerarlo un trastorno se debe a que los recurrentes excesos de videojuegos son cada vez más frecuentes en los jóvenes. Esta organización también reveló que entre un 1 y un 10% de la población general adulta es la cantidad de personas afectadas por esta patología. Por el momento, la OMS estima que esta enfermedad abarca todos los grupos de edad. Esta organización, admite también que gran parte de la población mundial son jugadores habituales por lo que un determinado porcentaje no la padece en comparación con el grupo que juega con mucha frecuencia.

La OMS explica que el diagnóstico de esta enfermedad mental requiere por lo menos 12 meses, pues todo depende que cómo se desarrolle el comportamiento de las personas. El trastorno del juego “es otra categoría de condiciones clínicas que no están asociadas con el uso de sustancias psicoactivas, pero que al mismo tiempo se consideran tan adictivas como las adicciones.” Así lo comentó Vladimir Poznyak jefe del Departamento de Salud Mental de la OMS a New Scientist.

Para que se haga un diagnóstico, el patrón negativo de comportamiento debe durar al menos 12 meses: “No puede ser solo un episodio de pocas horas o pocos días”, dijo Poznyak. Ante estos argumentos, la Asociación de Software de Entretenimiento (ESA) se pronunció ante lo declarado por la OMS, con el siguiente mensaje:

"Es nuestra esperanza que, a través del diálogo continuo, podamos ayudar a la OMS a evitar acciones apresuradas y errores que podrían tardar años en corregirse. "De hecho, los principales expertos en salud mental han advertido repetidamente de que la clasificación de trastorno de videojuegos crea un riesgo de diagnóstico erróneo para los pacientes que más necesitan ayuda", así reseñó el portal "Ciber sur" las declaraciones del jefe de la ESA, Stanley Pierre-Louis.

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