La Diva del Bronx luce un cuerpo envidiable, muchas mujeres quisieran lucir una figura tonificada como la de ella a sus casi 50 años (cumple el 24 de julio). Con disciplina, constancia y una dieta adecuada es posible lograrlo, claro está que JLo viene con estos hábitos desde hace ya varios años.
Son muchas las fotos que a la estrella le gusta compartir con sus seguidores en Instagram donde aparece con ropa deportiva haciendo sus rutinas junto a su futuro esposo, el ex beisbolista Alex Rodríguez.
Recientemente subió una imagen a la referida red social con la que demostró que goza de un abdomen y brazos de acero. Se cree que ese tiempo de compartir junto con su amorcito en el gimnasio es lo que la mantiene motivada. Así que chicas allí tienen un tip para ir con ánimo a hacer ejercicios.
Entre los tipos de actividades físicas que realiza Jennifer López, está el entrenamiento intenso con pesas y las clases de yoga. De hecho en reiteradas entrevistas ha comentado que en pocas ocasiones falta a un entrenamiento y sus hábitos alimenticios consisten en una dieta estricta donde todo es orgánico y de calidad.
Algunos de los ejercicios que practica
La publicación deportiva As.com destaca que JLo lleva consigo en todos sus entrenamientos un monitor para corregir su espalda y controlar el peso que carga para evitar una lesión. Ella emplea mancuernas clásicas pesadas para trabajar sus bíceps y pectorales. Sus presentaciones en conciertos dan muestra de que posee mucha agilidad, cantar y bailar como ella lo hace, no lo hace cualquiera, alguien sin entrenamiento mínimo termina desmayado.
La también diva de la actuación usa bandas elásticas para tonificar brazos, hombros y abdominales. También realiza ejercicios en una máquina que se conoce como murciélago para los oblicuos y la espalda.
Los glúteos y abdominales a su vez los trabaja con un banquillo, y también coloca peso en sus tobillos para ganar resistencia.
En definitiva, una propuesta de matrimonio, hijos y mucho trabajo no han sido impedimento para que la cantante boricua se dedique a cultivar su cuerpo.
¿Y tú, te animas a seguir su rutina? Quizás en un tiempo seas quien le diga a tu galán: “y el anillo pa’ cuando”
