Imagina que en el garaje de tu casa tienes dispuesto un taller para hacer arreglos domésticos y algunas tareas mecánicas en general. Todos los días al terminar tu faena, dejas en orden tus herramientas para la jornada del día siguiente.
Con el paso del tiempo comienzas a notar que las cosas siempre aparecen movidas, nada está donde lo dejaste, y es entonces cuando comienza a activarse tu imaginación. Según tu lógica, solo existen dos opciones: alguien está usando tus herramientas y olvida colocarlas en su sitio o, misteriosamente, son cambiadas de lugar por un fantasma.
Todo apunta a que parte de lo relatado en líneas anteriores fue lo que pensó Stephen McKears, un inglés de 72 años que utiliza el garaje de su casa como espacio para trabajar, y cuyas herramientas cambiaban de lugar día tras día.
Preocupado por lo que estaba sucediendo, Mckears decidió tomar cartas en el asunto para intentar dar con esa persona que según él, cambiaba de sitio sus cosas a su antojo Lo más intimidante es que esos cambios se daban por las noche, por eso llegó a creer que podía tratarse de algo escalofriante...
Esto fue lo que hizo
Mckears pidió la ayuda de uno de sus vecinos, que es fotógrafo de profesión, para instalar una cámara oculta en el garaje de su casa y de esa manera visualizar quién estaba cambiando de lugar sus herramientas. Una vez colocada la cámara, solo quedaba esperar hasta el día siguiente.
Para sorpresa de todos, no se trataba de ningún fantasma o ladrón. Era nada más y nada menos que un pequeño ratón que tenía complejo de organizador. El inteligente roedor tomaba las piezas pequeñas que Mackears dejaba sobre su mesa, y las guardaba en una cajita. Lo que nunca se supo fue por qué motivo.
El dueño de la cámara se quedó con la boca abierta después de dar con la identidad del visitante misterioso. De hecho, tras difundirse el vídeo por las redes sociales, confesó que en toda su carrera como fotógrafo jamás había visto un roedor con tal fuerza... Y es que levantar una pequeña cadena y tornillo para un animal tan pequeño no es tarea fácil.
Lo cierto es que tras el acontecimiento, Mackears se quedó más tranquilo, pero todavía falta por saber si adoptará al pequeño roedor y lo convertirá en su asistente, al más puro estilo de películas con roedores como 'Stuart Little' o 'Ratatouille'.