Al pasar tiempo de calidad con los hijos se establece una conexión afectiva entre todos los miembros de la familia. Este lazo hace que nos sintamos mejor en la casa y con nosotros mismos, porque nos sintonizamos con la vida del otro. Para lograr esto, compilamos de la revista Semana la manera en la que podemos hacerlo.
Es percatarnos de su comportamiento. Ver más allá de sus actitudes y leer los sentimientos para ayudarles con su madurez emocional. Hay que enseñarles a comprender cómo llevar cada emoción, así no quieran comentar qué ocurre.
Estar atentos a lo que expresan con sus palabras, lenguaje corporal, expresiones y estado de ánimo. Requiere de toda nuestra atención y de mirarles a los ojos cuando hablan. También es importante entender cómo se sienten sin juzgarlos.
Deben realizarse actividades en familia. No solo cosas divertidas, sino también rutinas del hogar o actividades escolares. Se debe estar presentes en los momentos de su vida, pequeños o grandes. Es necesario crear recuerdos sólidos, nexos.
Dales tiempo mientras todos se preparan en la rutina, conversen.
Cuéntales historias de cuando eran más pequeños o cuéntales tus historias con sus abuelos, tíos o primos. Crea un sentido de pertenencia.
Realizar rituales de unión familiar. Cada familia tiene algunos y, de no tenerlos, puedes construirlos. Nunca es tarde para comenzar.
TRES CLAVES PARA PASAR MÁS TIEMPO CON TUS HIJOS
Observar
Es percatarnos de su comportamiento. Ver más allá de sus actitudes y leer los sentimientos para ayudarles con su madurez emocional. Hay que enseñarles a comprender cómo llevar cada emoción, así no quieran comentar qué ocurre.
Escuchar
Estar atentos a lo que expresan con sus palabras, lenguaje corporal, expresiones y estado de ánimo. Requiere de toda nuestra atención y de mirarles a los ojos cuando hablan. También es importante entender cómo se sienten sin juzgarlos.
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Deben realizarse actividades en familia. No solo cosas divertidas, sino también rutinas del hogar o actividades escolares. Se debe estar presentes en los momentos de su vida, pequeños o grandes. Es necesario crear recuerdos sólidos, nexos.
¿Cómo hacerlo?
Aprovechar las mañanas
Dales tiempo mientras todos se preparan en la rutina, conversen.
Hacer sus propios cuentos
Cuéntales historias de cuando eran más pequeños o cuéntales tus historias con sus abuelos, tíos o primos. Crea un sentido de pertenencia.
Estar en familia
Realizar rituales de unión familiar. Cada familia tiene algunos y, de no tenerlos, puedes construirlos. Nunca es tarde para comenzar.
