Al hablar de deportes extremos son pocos los que se paran a pensar en los riesgos que corren las personas que practican estas disciplinas. Sin embargo, el peligro siempre está presente y se debe tener en cuenta.
Entre las cosas con las que tienen que lidiar los amantes del bungee jumping, rafting, escalada sobre roca o parapente, se encuentra el hecho de que los equipos para practicarlos le jueguen una mala pasada al atleta. A mayores de eso, también están las condiciones del clima, que en un abrir y cerrar de ojos pueden dar un revés a los acontecimientos.
Tal fue el caso de Greg Overton, un aficionado al parapente que tuvo un aparatoso choque el pasado 10 de julio, cuando realizaba un vuelo sobre el valle del sur de Lauterbrunnen (Suiza).
En esa ocasión, el clima tomó el control de su parapente, específicamente una turbulencia masiva que pudo ser originada por una burbuja térmica. Observa las imágenes que te mostramos a continuación:
Lo cierto es que el originario de Tacoma (Washington - EEUU), fue direccionado hacia un acantilado y su paracaídas se fue contra unas rocas.
Todo quedó registrado en vídeo gracias a la cámara que Overton llevaba en su casco. Lo bueno fue que, gracias a su destreza y a pesar de la fuerza del viento, logró girar en la dirección correcta y pudo aterrizar.
Para el hoy superviviente, lo sucedido es algo por lo que nunca había pasado en sus tres años de experiencia practicando parapente.
Una vez que Overton estuvo en terreno seguro, le tocó caminar unos tres kilómetros hasta la estación de tren para luego trasladarse al hospital. Por suerte, fue rápidamente atendido, le practicaron varias radiografías y tomografías.
El diagnóstico
Fractura menor en la vértebra L1, diversas raspaduras en codos y rodillas, además del labio partido. Por tal motivo, le indicaron reposo absoluto por dos semanas.
Una amarga experiencia que, a pesar de todo, tuvo un final feliz.